Para la decoradora de interiores Diana Piedra, lo primero que se debe elegir es el color ideal para las paredes. Sin embargo, es ideal no combinar demasiados tonos, pues podría dar la impresión de un espacio sobrecargado y poco

relajante. Si se busca un ambiente romántico se necesitan una paleta clara o si se prefiere una inyección de color, se pueden agregar algunos toques de verde, amarillo o azul, pero manteniendo el blanco como el marco general.

En el caso de elegir un papel tapiz texturado o con algún diseño, es mejor evitar los cuadros y espejos para que este se pueda lucir. También se puede agregar un tocador. Lo mínimo que debe medir de fondo es entre 50 cm y 60 cm y de largo entre 90 cm y 1,20 m

En un walking closet lo importante es el orden y el uso de repisas, cajones y compartimentos para mantener todo en su lugar. Si se prefiere mayor comodidad, se puede disponer de una butaca o un espejo de cuerpo entero. Otra opción para darle personalidad al ambiente es disponer una cama con dosel y para tenerlo el dormitorio debe tener en promedio entre 2 m y 2,10 m de altura.

En cuanto a la decoración, es importante que las paredes muestren algo de la personalidad de quien la ocupa. Cuadros, marcos de fotos de distintos tamaños y colores, repisas flotantes para añadir objetos de decoración como jarrones, alguna pequeña lámpara o revistas. También se pueden agregar posters o cuadros de gran formato.

Por último, es imprescindible pensar en la cama y en el edredón. Este puede agregar el toque de color, crear un contraste o mantener la paleta general.

Fuente: Urbania